Trump y Biden: duelo a distancia y televisado en una campaña alterada por el coronavirus
El segundo debate presidencial se convirtió en dos foros paralelos con votantes, el del republicano en Miami y el del demócrata en Filadelfia.
La noche de foros televisados de los candidatos presidenciales estadounidenses estuvo anoche marcada por la cerrada defensa que el actual mandatario republicano, Donald Trump, hizo de su gestión de la pandemia de coronavirus, mientras su rival demócrata, Joe Biden, lo acusó de «no hacer nada».
El segundo debate presidencial, cancelado luego de que Trump se negara a participar de forma virtual tras contagiarse se coronavirus, se convirtió en dos foros paralelos con votantes, el de el republicano en Miami y el de el demócrata en Filadelfia.
«Estamos llegando al final», dijo en el canal NBC un optimista Trump, a pesar del reciente aumento de casos de coronavirus en el país que contabiliza casi 218 mil muertos y 8 millones de contagiados.
«Hemos hecho un trabajo fantástico (…) Las vacunas están llegando y los tratamientos están llegando», agregó..
Simultáneamente, en la cadena ABC, Biden acusó a Trump de «no hacer nada» ante el aumento de contagios y muertes.
A 19 días de las elecciones presidenciales, Trump se mostró molesto ante la presión de la moderadora Savannah Guthrie sobre su respuesta al coronavirus, el supremacismo blanco, sus impuestos, y sus planes para reemplazar al programa de seguro de salud conocido como Obamacare.
Se negó a condenar a QAnon, una de las principales teorías conspirativas de la extrema derecha estadounidense que mezcla una red internacional de tráfico sexual de niños y un supuesto golpe de Estado orquestado por el expresidente, Barack Obama, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton y el multimillonario George Soros.
Su rival demócrata, en tanto, que lidera las encuestas, respondió a las preguntas de la audiencia en un tono mucho más tranquilo, señaló la agencia de noticias AFP.
«Lo que voy a hacer, si soy elegido presidente, primero, y no es broma (…) será llamar a los republicanos», dijo, recordando su reputación, cuando fue senador por más de 35 años, de ser un hombre capaz de traspasar barreras partidarias.
La campaña volvió a sacudirse por el coronavirus cuando la candidata demócrata a la vicepresidencia, Kamala Harris, suspendió sus viajes de campaña hasta el domingo «por precaución» debido a dos casos de Covid-19 en su entorno.
Por recomendación de sus médicos, Biden decidió no interrumpir sus desplazamientos a pesar de otro caso descubierto en la tripulación de su avión, una persona que permaneció «a más de 15 metros» y tenía, como el candidato, una mascarilla.
Los dos Estados en que se desarrollaron los foros son considerados clave para ganar los comicios del 3 de noviembre
En 2016 le reportaron victorias a Trump, pero en ambos Biden encabeza ahora la intención de voto.
Las encuestas son preocupantes para el republicano en esta campaña plagada de sobresaltos y cuando más de 17,5 millones de estadounidenses ya votaron anticipadamente.
Los demócratas tienen «buena chance» de ganar la Casa Blanca, reconoció ayer el senador republicano Lindsey Graham, muy cercano a Trump.
Biden lidera por casi 10 puntos porcentuales el promedio de los sondeos nacionales y aventaja a Trump por unos 5 puntos en los «campos de batalla», los estados que por su peso electoral pueden definir la contienda.
Trump, recuperado de la Covid-19, enfermedad de la que se autocalificó «inmune», intensificó su campaña, rodeándose cada noche de miles de simpatizantes con gorras rojas en estados clave.
En Florida, Pensilvania e Iowa encadenó tres mitines en tres días y celebró un cuarto el jueves en Carolina del Norte.