Se lanzó el Concurso Microcuentos “Niñez Libre, Recuerdos Maravillosos” en 100 palabras
La Fabrica Cultural y la Sociedad Argentina de Escritores (SADE) delegación Chaco, realizaron el lanzamiento del 3° Concurso de Micro Cuentos “Niñez libre, recuerdos maravillosos” en 100 palabras.
El concurso tiene como propósito incentivar la creatividad, visibilizando y divulgando el potencial creativo de los artistas, y fomentando la lectura y escritura de microcuentos para la infancia, en el marco del 11° Festival Internacional de Narración Oral Escénica, que se llevará a cabo del 23 al 26 de septiembre en Resistencia.
La participación en este concurso será para autores, escritores nacionales y tendrá las siguientes categorías: Juveniles de 12 a 17 años y Mayores de 18 en adelante. El tema del microcuento para esta tercera edición es “Niñez libre, recuerdos maravillosos”. Deberá tener una extensión máxima de 100 palabras. Cada concursante podrá enviar hasta un máximo de 2 microcuentos, firmados bajo Seudónimo.
El plazo máximo de recepción de los microcuentos será el 13 de Junio del 2020, hasta las 23:59.
El jurado estará compuesto por prestigiosos representante de las letras de la provincia. El fallo del jurado será inapelable y serán comunicado los ganadores mediante un correo electrónico.
Los participantes deberán enviar los MicroCuentos al correo electrónico: asociacionlafabrica@gmail.com , con el asunto: Concurso MicroCuentos – Nombre y apellido. La información deberá presentarse de la siguiente manera: Escritos en Ariel cuerpo 12 a doble espacio, deberán incluir todos sus datos: Seudónimo – Nombre y apellido – DNI – Domicilio – Contacto: Tel – Correo electrónico.
El cuento ganador de la Edición 2019
El primer premio de la edición del año 2019 fue para Cecilia Cabrera, de Resistencia cuyo microcuento se denominó ¿Cuestión de percepción?
El cuento:
Mariana golpeó con su ojo el puño de Sebastián. Los bordes de sus cuencas le hicieron sangrar los nudillos, ella insistió y arremetió con el otro ojo hasta impactar en el mismo puño. Elevó la apuesta y dio un golpe seco con su abdomen a la rodilla derecha del infiel. No le importó que fuera la rodilla lesionada hace unos años. Cuando llegó el turno de enfrentar los pies de su esposo, se tiró al piso y utilizó su espalda, intermitente contra cada pie. La lucha le borró la imagen de su marido horquetado con la morocha en la mesada