Resistencia planifica su futuro con un Plan de Ordenamiento Territorial
El Doctor Miguel Ángel Barreto, Decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU-UNNE) y uno de los directores del Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial (POT Res 2040) del Municipio de Resistencia, se refirió a ese trabajo realizado y destacó la importancia de que el municipio cuente con una herramienta de gestión de estas características, al igual que lo requieren otras grandes ciudades de la región, para consolidarse como centros urbanos de referencia.
La ciudad de Resistencia, Chaco, tiene una población de 315.677 habitantes actualmente, según estimación en base a proyecciones del Censo 2010. Integra un área metropolitana que en 2010 tenía 387.340 habitantes, un área de influencia de 409.820 habitantes y un nodo biprovincial de 793.149 habitantes, junto al Gran Corrientes.
Hacia 2040 se proyecta que Resistencia tendrá 42.140 hogares más y el Área Metropolitana del Gran Resistencia (AMGR) sumará 64.830 hogares respecto a la cantidad actual.
Ante esa realidad de un marcado crecimiento de población y a la necesidad de consolidar a la capital chaqueña como centro urbano regional, el Municipio de Resistencia y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNNE elaboraron el Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial del Municipio de Resistencia «POT Res 2040» que define acciones a corto mediano y largo plazo para favorecer el desarrollo ordenado de la ciudad y la metrópolis que conforma.
El doctor Miguel Ángel Barreto, Decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU-UNNE), y director del «POT Res 2040» junto al ingeniero Raúl Codutti, Secretario General del Municipio de Resistencia, detalló los aspectos principales de las propuestas del plan.
“Tiene por objetivo dotar al Municipio de Resistencia de una herramienta de gestión fundamental para trasformar y encausar con previsibilidad el desarrollo y el ordenamiento territorial en las próximas décadas, con el fin último de mejorar la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras” sostuvo
Explicó que el plan toma en cuenta factores claves y temas críticos actuales para trazar estrategias futuras y contempla escenarios posibles, enmarcados en contextos económicos y políticos nacional y provincial cambiantes, así como respuestas locales innovadoras para el desarrollo del plan.
Consideró que el Plan es una herramienta puesta a disposición del gobierno municipal, que requiere de la decisión política y compromiso ciudadano para que se transforme en una política de Estado.
Recordó que el Municipio de Resistencia ha desarrollado en el tiempo varios planes, sin embargo, no fueron implementados mediante normas específicas.
El Código de Planeamiento Urbano Ambiental de la ciudad de Resistencia tiene 40 años de antigüedad, sufrió siete modificaciones parciales y se basó en un Plan aun anterior (1977).
En el año 2016, la Municipalidad de Resistencia conformó una comisión para la revisión y actualización integral del Código, que abrió camino a la elaboración del POT Res 2040, que fue realizado a lo largo de dos años de trabajo por un equipo multidisciplinario de especialistas y estudiantes de la FAU y de las facultades de Humanidades y Ciencias Económicas de la UNNE.
Contó además con el aporte fundamental de distintas áreas técnicas del gobierno municipal, de la Presidencia del Concejo Deliberante, del Consejo Permanente del Código de Planeamiento Urbano de Resistencia, de organismos del gobierno provincial, organismos nacionales y de entidades civiles. Contó también con el aporte de la ciudadanía a través de distintas instancias de participación pública realizadas durante su elaboración.
La propuesta del Plan se expresa en 8 líneas estratégicas, 28 programas de actuación y 112 ideas de proyectos que deben ser desarrollados en su fase ejecutiva, para lo cual, el Plan contempla, además, la puesta en funcionamiento de una Unidad de Gestión, del Consejo Asesor y posibles instrumentos para su implementación.
«La visión del Plan es convertir a Resistencia en un polo de referencia regional, socialmente solidaria e inclusiva, ambientalmente sostenible, urbanísticamente completa, innovadora, inteligente, respetuosa de lo público, basada en las culturas, la educación de excelencia y en una economía de calidad con perfil comercial, industrial, financiero, de servicios y turístico» destacó el Doctor Barreto y expuso en detalles los aspectos principales de cada área o eje temático del «PET Res 2040».
EJES ESTRATÉGICOS PRINCIPALES
En el aspecto de Integración territorial, se busca posicionar a Resistencia como punto logístico de jerarquía en los corredores regionales, nacionales e internacionales; y desarrollar equipamientos y capacidades de logística para favorecer la integración territorial de Resistencia a los corredores regionales, nacionales e internacionales.
En cuanto al «Ambiente natural», se plantea ocupar de forma sostenible el territorio según restricciones ambientales y de riesgo hídrico, y mejorar el drenaje urbano y mitigar la vulnerabilidad hídrica.
Se establece la necesidad de prever la atención de población en situaciones de emergencia hídrica, promover prácticas sostenibles en las actividades económicas en el periurbano, y preservar las condiciones naturales del sistema lacustre y de espacios verdes (limpieza y arbolado urbano).
Además, se promueve el mantenimiento del sistema de defensa contra inundaciones y aprovechar de forma sostenible paisajes y recursos naturales.
En el eje «Hábitat y vivienda social» se establece garantizar tenencia segura del suelo para vivienda social única, reasentar a la población vulnerable ubicada en zonas no aptas, y priorizar el mejoramiento habitacional del hábitat precario.
El programa agrega la importancia de urbanizar y cualificar el espacio urbano de villas y asentamientos, promocionar la mixtura social en los barrios, incrementar la oferta habitacional social, ajustar la oferta de vivienda social a cambios demográficos, mejorar la oferta habitacional en el área central, y estimular ofertas de vivienda para sectores con capacidad para créditos accesibles.
En el eje «Consolidación, densificación, expansión y conectividad» se establece la necesidad de consolidar la red de infraestructura básica, dar continuidad a la red vial del área urbana haciendo permeables límites y barreras urbanas, mejorar la conectividad interna en el periurbano, y conectar vías de la periferia urbana que mejoren la funcionalidad del sistema vial, la accesibilidad a la periferia y a la circunvalación metropolitana.
Además, se proyecta ocupar suelos vacantes disponibles dentro del área urbana, densificar el área central y las zonas servidas con mejores indicadores de consolidación y planificar áreas aptas de expansión futura, con tejidos adaptados, densidad media y mixtura de usos compatibles.
En el eje «Movilidad, descentralización y espacios verdes» se promueve definir nuevas centralidades en la periferia urbana, regularizar la situación dominial de los espacios verdes barriales y definir nuevos espacios verdes de escala urbana.
Además, se proyecta crear una red de espacios verdes ligados a las nuevas centralidades, crear un sistema integrado de movilidad con modalidades alternativas y equipamientos adecuados, reorganizar la red de TPP municipal existente, y mejorar el equipamiento y la calidad del servicio de la red de TPP.
Se plantea crear un sistema de TPP líneas municipales y metropolitanas integradas, organizar en niveles jerárquicos las vías del tránsito motorizado, mejorar equipamiento, señalizaciones y mobiliario de las vías, capacitar al ciudadano en materia de tránsito seguro, y crear ciclovías y sendas peatonales ligadas a la red de espacios verdes.
«Cultura, turismo y patrimonio edilicio y urbano» es otro de los ejes abordados, respecto al cual se plantea fomentar el mejoramiento de la infraestructura de centros culturales, museos, cines, bares, restaurantes y centros deportivos, y promover eventos culturales, recreativos y deportivos para públicos de escala regional.
También identificar y custodiar recursos patrimoniales arquitectónicos y urbanos no protegidos, e impulsar la puesta en valor de edificios y sectores urbanos con valor patrimonial, con la participación de propietarios, especialistas y organizaciones civiles.
Además, se promueve sancionar una regulación integral para la puesta en valor del patrimonio arquitectónico y urbano, y promocionar el patrimonio arquitectónico y urbano en el marco de actividades turísticas de la ciudad.
En el eje «Economía y empleo» se resalta la relevancia de promover progresivamente el desarrollo de una ciudad inteligente, innovadora, respetuosa de lo público, basada en sus culturas y la educación de excelencia, potenciar las funciones comerciales, administrativas, financieras y de servicios de la ciudad; fomentar el gasto local de la masa salarial pública; promocionar nuevas actividades económicas generadoras de empleos de calidad; mejorar la recaudación municipal para sustentar las inversiones públicas, asegurando el mantenimiento del equilibrio fiscal; y mejorar la tasa de actividad de la población económicamente activa.
Se considera prioritario incrementar las oportunidades de empleo para jóvenes y mujeres; mejorar organización y condiciones laborales de trabajadores informales; desarrollar la economía social y la capacitación de trabajadores informales; y promover el desarrollo social en barrios críticos.
Por último, en el eje «Planificación y gestión territorial» se proyecta promover una gobernanza basada en el ordenamiento y la planificación territorial con normas actualizadas; y capitalizar planes territoriales, planes de sector y proyectos urbanos existentes, pero no aplicados, realizados por diferentes niveles de gobierno.
En este eje se promueve generar condiciones para liderar procesos de articulación interjurisdiccional entre niveles de gobierno, verticales y horizontales; fortalecer una organización territorial municipal basada en la descentralización para mejorar la prestación de servicios y la participación ciudadana; e impulsar la mejora continua de los servicios municipales.
Cabe destacar que Plan ya sido aprobado por ordenanza por el Poder Ejecutivo municipal y dotado de presupuesto anual para su puesta en funcionamiento, habiendo sido remitido al Concejo Deliberante del municipio para su tratamiento final.
