Preocupación en el Gobierno por la presencia de un submarino nuclear de Estados Unidos en el Atlántico Sur
Cancillería emitió hoy un comunicado en el que expresa su «grave preocupación» ante la presencia de un submarino estadounidense con apoyo británico en el Atlántico Sur. Desde el ministerio señalan que se enteraron por las redes sociales de Commander Submarine Force Atlantic (COMSUBLANT) pero aún no han tenido ningún contacto oficial. Enviarán una nota de protesta a la embajada de Estados Unidos pidiendo explicaciones.
«Una aeronave británica de las Islas Malvinas colaboró recientemente con el USS Greeneville (SSN 772) en las aguas abiertas del océano Atlántico, demostrando el alcance global de las fuerzas de ambas naciones» señala el twitter oficial de las fuerzas submarinas americanas.
Desde el organismo a cargo de Felipe Solá dijeron que preventivamente rechazan la presencia de un submarino con capacidad nuclear. Actualmente, están tratando de chequear la información ya que aparentemente el submarino es a propulsión nuclear. El peligro radica en que, sin embargo, tiene la posibilidad de transportar armas nucleares. Cuestionaron la realización de ejercicios nucleares y específicamente en una «zona de paz y desnuclearizada». Además de la utilización de las islas Malvinas como una base militar, al ser un territorio en disputa y así lo ha reconocido Estados Unidos.
«Corresponde recordar que la presencia de naves susceptibles de portar y emplear armamentos nucleares en el Atlántico Sur contradice la Resolución 41/11 de la Asamblea General de las Naciones Unidas (Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur), que entre otras disposiciones, exhorta a los Estados de todas las demás regiones, en especial a los Estados militarmente importantes, a que respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar en dicha región, la no introducción de armas nucleares o de otras armas de destrucción masiva.» señala el comunicado emitido por el ministerio de Relaciones Exteriores.
Luego agrega: «No es la primera vez que la Argentina ha marcado, por otra parte la presencia de una base militar británica en las Islas Malvinas» lo cual también contradice resoluciones de las Naciones Unidas. «La utilización de esas fuerzas instaladas ilegalmente para objetivos geoestratégicos globales son una demostración acabada de que los argumentos utilizados por el Reino Unido nada tienen que ver con la relación bilateral con la Argentina».
«El Greeneville estaba llevando a cabo un traslado de rutina en aguas internacionales y no realizó paradas logísticas en la región», contestaron a LA NACION desde la embajada de Estados Unidos. «Mientras transitaba en aguas internacionales, Greenville colaboró ??con la aeronave del Reino Unido.» agregaron.
Se trata del segundo roce entre ambos países desde la asunción del nuevo presidente Joe Biden. El 29 de enero, el buque Stone de la Guardia Costera americana, canceló su visita al puerto de Mar del Plata por «cuestiones logísticas». La visita a la Argentina era la última parada del viaje inaugural de la nave más moderna que tiene la fuerza que busca reforzar las alianzas regionales de seguridad marítima y combatir la pesca ilegal no declarada y no regulada (INDNR).