Pettovello sobre la nueva política alimentaria: «Nosotros queremos transparencia»
La ministra de Capital Humano de la Nación, Sandra Pettovello, cuestionó a los líderes de las organizaciones sociales por supuestas «irregularidades» en la compra y distribución de alimentos destinados a los comedores durante la gestión de Alberto Fernández. La funcionaria calificó que «es abominable aprovechar la vulnerabilidad de la gente».
El dirigente social, Juan Grabois, denunció penalmente a Pettovello acusándola de incumplimiento de los deberes de funcionario público por no disponer de la entrega de alimentos en comedores comunitarios. Tras lo cual la funcionaria salió a responder en la prensa, pero sin personalizar dijo que «el problema» de los referentes sociales «es que les importa mucho el modo en el que se proyecta la política alimentaria y nosotros planificamos que sea de otra manera, de una manera que no les conviene quizás».
«Nosotros queremos transparencia, la única mediación que admitimos es la transparencia a través de organismos internacionales que auditan el dinero que nosotros les damos a las organizaciones», expresó Pettovello en una entrevista.
Según la ministra, «alguien, que sabe mucho del tema social, me comentó que compraban fideos de segunda o tercera calidad para la gente». En ese sentido distinguió que «nosotros pensamos la política alimentaria de otro modo, que los chicos se puedan nutrir adecuadamente y que no se hagan negocios con los alimentos».
«Es abominable aprovechar la vulnerabilidad de la gente para hacer negocio», apuntó.
Pettovello aclaró que no va a acusar a nadie, pero que el Ministerio está llevando a cabo auditorías.
Para la ministra, las personas vulnerables que forman parte de las organizaciones «no pueden decidir por sí mismos» porque «son extorsionados» por los líderes de esas estructuras sociales.
Eliminación del Potenciar Trabajo
Pettovello argumentó que la eliminación del Potenciar Trabajo se dio porque «el objetivo no se había cumplido».
Cuestionó la implementación del programa porque «la gente que consiguió trabajo fue solo el 1,3%». «De todo ese universo hay gente que tiene mayor vulnerabilidad y menos posibilidad de entrar al mundo laboral como madres de 4 hijos o personas de más de 50 años. Hay mucha gente con miedo de aceptar un trabajo, dejar el plan y quedarse sin nada», analizó.