Mensaje de la Iglesia a Macri en Salta: “Los pobres no son una molestia, son una oportunidad”
El arzobispo de Salta, Mario Antonio Cargnello, se dirigió este domingo al presidente Mauricio Macri durante la misa de celebración del Señor y la Virgen del Milagro para señalar que “los pobres no son una molestia, son una oportunidad”.
Luego de recordarle que él había prometido luchar por el objetivo de alcanzar la pobreza cero en el país, el prelado convocó al jefe de estado a escuchar a los pobres que, dijo, “son maestros que nos enseñan”.
Luego de agradecer la presencia del Presidente en la celebración, Cargnello recordó que Macri “dijo a todos los argentinos que se ha sentido golpeado” tras los resultados de las PASO y, en ese clima, le dijo al mandatario que quería “hablarle de corazón a corazón”, ya que habrá decidido ir hasta Salta para participar de la misa.
“Ha venido a un buen lugar, a encontrarse con el Señor. Dios transforma el corazón y provoca la libertad”, dijo el arzobispo.
En ese tono hizo extensivo el mensaje al resto de las autoridades políticas presentes en el acto, entre quienes también estaban el candidato a vicepresidente y gobernador salteño Juan Manuel Urtubey.
Y, al Presidente, le dijo: “Cuando usted empezó dijo que iba a luchar por la probreza cero. ¿Qué le puede decir Salta ahora?”.
“Ayer, cuando veía los mineros,veía a gente humilde. Trabaja en La Puna. han venido caminando con 15 grados bajo cero. Trabajan en esa situación. Es gente que trabaja horas y horas en situaciones de inclemencia para darle riqueza a la república”, aseguró.
Respecto del caso de los mineros, que peregrinaron hasta Salta, dijo: “Ellos vienen juntos, el dueño de la mina, el gerente y el último de los mineros. Y provocan una nueva sociedad. ¿No es posible venir juntos caminando por la historia? ¿Por qué creemos que la historia tiene que hacerse desde la pelea?”
“Nos lo enseñan los pobres”, aseguró y añadió: “Por eso Mauricio has hablado de la pobreza. Llévate (entonces) el rostro de los pobres. Son dignos, ¡son argentinos!”.
Además, entre aplausos de la gente, el arzobispo Cargnello acotó: “Son respetuosos y merecen que nos pongamos de rodillas delante de ellos. Vale para todos hermanos, nada más”.
Fuente: La Voz