El servicio de inteligencia israelí reveló llamados entre los atacantes y su familia tras la matanza en un kibutz. Además revelaron que la organización terrorista paga US$10.000 y un departamento por cada rehén israelí llevado a Gaza.
El testimonio es estremecedor. “Mamá, maté a 10 judíos con mis propias manos”, dice el miliciano de Hamas en una llamada a su familia en Gaza tras causar una masacre en uno de los kibutzim del sur de Israel que el grupo islámico atacó el 7 de octubre.
Del otro lado de la línea lo escuchan sus padres. El joven sigue su relato: “Abrí mi Whatsapp ahora y mirá todos los muertos”, afirma. Su padre le da entonces la bendición: “Que Dios te proteja”.
El llamado, hecho desde el teléfono de una de las víctimas de la matanza, fue localizado por el Shin Bet, el servicio de inteligencia israelí, durante el ataque.
Cómo fue el diálogo de un miliciano de Hamas con sus padres tras asesinar a 10 israelíes
El canciller israelí, Eli Cohen, reveló la grabación durante una reunión del consejo de seguridad de la ONU, informó el portal Ynet.
“Les hablo desde el teléfono de una mujer judía, la maté a ella y a su marido, con mis propias manos maté 10″, dice el joven.
El miliciano le contó a su padre que hablaba desde el Kibbutz Maflisim. “Papá, 10 con mis propias manos. Papá, maté a 10. Su sangre está en mis manos. Dame a mamá”, dijo.
Su madre le respondió: “Oh, hijo mío, que Dios te proteja”, mientras su hijo insistía: “En mi vida, 10 con mis propias manos, sentí 10 con mis propias manos”.
La mujer le responde emocionada: “Ojalá estuviera contigo”, a lo que el joven replica: “Mamá, tu hijo es un héroe”.
En ese instante, el hermano le pide que vuelva a la Gaza, pero el miliiciano afirma: No hay retorno. Es muerte o victoria. ¿Cómo voy a regresar? Abre WhatsApp, mira cuántos muertos. ¿Cómo puedo volver? Los maté con mis propias manos”.
10.000 dólares y un departamento por cada rehén
En tanto, la policía israelí y el Shin Bet interrogaron a seis milicianos de Hamas detenidos que participaron en la matanza y cuyos testimonios fueron revelados por la prensa local. Incluso, se divulgó un video.
Según la Agencia Judía de Noticias, todos los atacantes dijeron que recibieron “instrucciones explícitas de matar y secuestrar a civiles, incluidos ancianos, mujeres y niños”.
Uno de los detenidos confesó que sus jefes, que quedaron en Gaza, les prometieron un premio por su accionar: “Quien traiga un rehén (a Gaza) recibirá 10.000 dólares y un departamento”.
Otro miliciano que atacó el kibutz de Be’eri dijo en el interrogatorio: “Cuando entré a la ciudad, vi a dos en una moto. Se llevaron a una mujer de entre 60 y 65 años en la motocicleta” a Gaza.
Además, confesaron que “las instrucciones eran secuestrar a mujeres y niños”. Otro describió que encontró un cadáver y afirmó: “Su cuerpo yacía en el suelo. Le disparé y mi comandante me gritó por desperdiciar balas en un cadáver”.
Según Ynet, otro detenido afirmó: “Hamas nos ordenó aplastarles la cabeza y cortarles las piernas a todo aquel que nos crucemos”.
“El plan era ir de casa en casa, de habitación en habitación, lanzar granadas y matar a todos los que estaban en el lugar, incluidas mujeres y niños”, aseguró. El portal dijo que eligió no citar declaraciones sobre abusos sexuales.