Los astronautas de SpaceX regresaron con éxito tras completar su misión en una estación espacial
La cápsula Dragon de SpaceX aterrizo en el Golfo de México después de volver a entrar en la atmósfera de la Tierra y desplegar sus paracaídas sin ningún problema. El piloto Doug Hurley, uno de los dos astronautas a bordo, dijo: “Es verdaderamente nuestro honor y privilegio”. Mientras las comunicaciones de radio se cortaban, se escuchó el festejo de los empleados de la NASA durante la transmisión oficial.
Fue el primer aterrizaje en el agua de una nave espacial de EEUU desde la misión Apollo-Soyuz de 1975.
Además de Huley, en la nave también viajó Bob Behnken. Ambos dejaron ayer Estación Espacial Internacional y viajaron 19 horas camino a la Tierra.
“Bienvenidos a la Tierra y gracias por haber volado con SpaceX”, anunció el director de vuelo a los astronautas, que respondieron inmediatamente. La cápsula Crew Dragon Endeavour amerizó frente a las costas de Pensacola, Florida (sureste), como previsto, a las 18:48 GMT y sin sufrir daños tras atravesar la atmósfera terrestre, mostraron imágenes transmitidas en directo.
La cápsula fue recogida en aguas del Atlántico por el bote de recuperación “GO Navigator”. Allí los astronautas deben ser sometidos a chequeo médico antes de ser trasladados a tierra.
El éxito de la misión demostró que los Estados Unidos una vez más tiene la capacidad de enviar a sus astronautas al espacio y traerlos de vuelta.
La fase final de esta operación de la agencia espacial estadounidense en sociedad con la compañía del excéntrico empresario Elon Musk, afrontó hasta último momento temores por el riesgo de la tormenta tropical Isaías, que bordea la península de Florida y que había hecho descartar el lugar original para el amerizaje.
La misión es también una gran victoria para la compañía SpaceX, que fue fundada hace pocos años, en 2002, pero que en este tiempo ya se ha abierto camino a pasos agigantados, incluso superando a Boeing, su principal competidor en la carrera espacial comercial. Los Estados Unidos han pagado a las dos compañías un total de unos 7.000 millones de dólares por sus contratos de “taxi espacial”, aunque los esfuerzos del gigante aeroespacial Boeing han fracasado estrepitosamente.
Los astronautas de la NASA Douglas Hurley y Robert Behnken se dirigen a la plataforma de lanzamiento 39 para abordar el cohete SpaceX Falcon 9 para un segundo intento de lanzamiento en la misión SpaceX Demo-2 de la NASA a la Estación Espacial Internacional desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Cabo Cañaveral, Florida , EE.UU. 30 de mayo de 2020. REUTERS / Joe Skipper
La reentrada atmosférica
La cápsula Crew Dragon realizó varios procedimientos precisos para volver a casa con seguridad. A la 17:51 GMT, se deshizo de su “tronco” que contiene su energía, calor y otros sistemas, que volverá a entrar en la atmósfera de la Tierra y se quemará. Disparó entonces sus propulsores para maniobrar en la órbita y trayectoria adecuadas para el amerizaje. A las 18:32 GMT reingresó a la atmósfera a una velocidad de alrededor de 17.500 mph (28.000 kph).
El escudo térmico de la nave necesitaba soportar temperaturas de 1900 grados centígrados, lo que causó un apagón de comunicaciones durante unos minutos. Luego, desplegó dos juegos de paracaídas en su descenso, reduciendo su velocidad a sólo 15 mph (24 kph) al golpear el agua.
Una vez fuera de la nave, los dos astronautas fueron llevados a bordo de una nave de recuperación para un chequeo médico antes de ser llevados a tierr