Legalización del Aborto: Días claves para un proyecto que volverá a ser debatido en el Congreso
Durante su discurso en el Congreso por la apertura de las Sesiones Ordinarias, Alberto Fernández fue claro al confirmar que impulsará la legalización del aborto. El debate volverá a un recinto donde, en Diputados volvería a obtener media sanción pero en el Senado todavía se imponen los que están en contra. “En el siglo XXI toda sociedad necesita respetar la decisión individual de sus miembros a disponer libremente de sus cuerpos» fundamentó el Presidente.
Cuando Alberto Fernández tocó el tema del Aborto dentro de su discurso, la reacción de los presentes fue elocuente: Se transformó en el momento que más aplausos generó. Fue el único instante en el que legisladores de la oposición se pusieron de pie ante el Presidente.
«En el siglo XXI toda sociedad necesita respetar la decisión individual de sus miembros a disponer libremente de sus cuerpos», enfatizó Fernández, quien reiteró que la iniciativa iría acompañada de un «plan de los 1000 días», que garantice la atención y el cuidado integral de la vida y de la salud de la mujer embarazada y de sus hijos en los primeros años de vida.
En este sentido, el panorama del proyecto de la Interrupción voluntaria del Embarazo todavía no logra imponerse completamente en ambas cámaras del Congreso de la Nación. En diputados, como la primera vez que se debatió, obtendría la media sanción pero en el Senado, por el momento, siguen imponiéndose aquellos que no están a favor.
El Gobierno no detalló todavía qué diferencias tendrá su iniciativa con la que se debatió en 2018 y se aprobó en la Cámara de Diputados, proyecto que no pasó el filtro del Senado. Si el contenido fuera el mismo o muy similar, dos años después, con una nueva composición de ambas cámaras, el Senado seguiría siendo un terreno hostil para el avance del plan de despenalización.
Según publican varios medios, hay relevamientos que indican la postura de los legisladores Diputados y Senadores respecto a este proyecto. En Diputados, unos 107 legisladores votarían a favor y 101 lo harían en contra. Si bien el proyecto se aprobaría -como pasó en 2018- todavía hay 49 indecisos o diputados que todavía no se expresaron, lo que podría inclinar la balanza para cualquiera de los dos lados.
En cuanto a la Cámara baja, la postura expresada por los legisladores en el recinto o en declaraciones públicas, la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo sumaría 34 votos negativos en el Senado contra 33 afirmativos. Los cinco legisladores restantes para llegar a los 72 senadores no expresaron su postura o adelantaron que se abstendrán.
Así las cosas, el Senado se convertirá en el centro del debate por el proyecto de la legalización del aborto que, de acuerdo con el anuncio de ayer del presidente Alberto Fernández, la Casa Rosada enviará al Congreso dentro de los próximos diez días.
“Desde 1921 la Argentina penaliza la interrupción voluntaria del embarazo en la mayoría de las situaciones. Cien años después la jurisprudencia da cuenta de lo ineficaz que resulta la norma. Está dicho que son muchas las mujeres que no se sienten conminadas por la pena prevista para el aborto y recurren a él para interrumpir sus embarazos. La existencia de la amenaza penal no solo ha sido ineficiente demostrando que el devenir social transcurre más allá de la misma norma, también ha condenado a muchas mujeres, generalmente de escasos recursos, a recurrir a prácticas abortivas en la más absoluta clandestinidad poniendo en riesgo su salud y a veces su vida misma” fundamentó Alberto Fernández y logró hacer poner de pie y con aplausos a Diputados y Senadores de la oposición.
Sin embargo, Las versiones indican que el proyecto incluirá la “objeción de conciencia” para médicos y clínicas privadas, pero obligará a atender en hospitales públicos. Esa posibilidad de qué médicos/as, anestesistas, enfermeras o instituciones completas se nieguen a hacer la práctica podría volver a este punto en particular uno de los principales ejes de debate.
Fuente: Diario21tv.
