La historia de «Nima», la nutria gigante que atravesó el Atlántico para habitar el Iberá
«Nima», nació y se crío en el zoológico de Madrid y viajó en avión para ser adoptada por el Parque Iberá en Corrientes. Luego de pasar por un período de cuarentena, llegó al parque.
La Fundación Rewilding informó este miércoles la historia de Nima, una nutria gigante. Se trata de una hembra que atravesó el océano Atlántico para habitar el Iberá.
«Gracias al trabajo en conjunto con el Zoo de Madrid, Nima, una hembra de nutria gigante, atravesó el Océano Atlántico para formar parte del proyecto de reintroducción de su especie en el Parque Iberá», confirmaron desde la entidad en sus redes sociales.
Nima, nació y se crío en el zoológico de Madrid y viajó en avión para ser adoptada por el Parque Iberá en Corrientes. Luego de pasar por un período de cuarentena, llegó al parque y se integró con otras nutrias a un corral de presuelta.
Según indicaron desde la fundación, el traslado se dio porque «el gran humedal correntino, se encuentra en un corral de presuelta con Coco (un macho, proveniente de Dinamarca) y dos de sus cachorros».
«Esperamos que Nima logre reproducirse con Coco para agrandar este núcleo familiar, una condición necesaria para su posterior liberación, ya que esta especie vive en grandes grupos», indicaron.
De hecho, en los videos difundidos por la institución, se puede ver cómo Nima juega con sus pares en libertad.
Con la llegada de Nima, ya son seis los ejemplares de nutria gigante que forman parte del proyecto para traer de nuevo al depredador tope de las aguas brillantes del Iberá.
La historia de la nutria gigante y su importancia
Según indica la Fundación Rewilding en su sitio oficial, el lobo gargantilla (Pteronura brasiliensis), o nutria gigante, es la especie de nutria más grande del mundo, pudiendo alcanzar una longitud de hasta 1,8 metros.
Fue depredador tope de los ecosistemas acuáticos de Corrientes, donde se alimentó de peces y yacarés. Hasta mediados del siglo XX era posible verlo en el río Paraná, cerca de la capital de la provincia, y se ha comprobado su presencia en Iberá en base a un cráneo hallado en una de sus islas. Este espectacular mamífero está extinto en Corrientes y en toda la Argentina.
La mayor parte de la dieta de la nutria gigante está compuesta por peces, aunque puede incluir crustáceos, moluscos y vertebrados terrestres como yacarés sub-adultos, aves o roedores. Por sus características alimenticias, este carnívoro suele ser predador tope en las cadenas tróficas de los cursos de agua donde habita, siendo una especie clave en dichos ecosistemas.
La nutria gigante está catalogada como amenazada a nivel internacional, críticamente amenazada en la mayoría de los países donde se distribuye, e incluso considerada probablemente extinta en toda Argentina según la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza).
La Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos (SAREM) la considera En Peligro Crítico de Extinción y menciona que no hay registros de una población estable o individuos adultos con territorios estables en la Argentina en al menos los últimos 30 años.