“La función de la ESI es buscar un mundo más igualitario”, manifestó Nadia Musaubach
En este sentido, Musaubach manifestó que “la ESI tiene ya 16 años, pero tiene muchos tabúes”. “Sigue estando la idea de la ideología de género, se sigue pensando, en algunos sectores, que la homosexualidad es una enfermedad, o que los niños no pueden asumir su identidad de género siendo menores”, mencionó.
Por lo tanto, “tiene avances y retrocesos; se ha avanzado mucho ya que todas las escuelas tienen algún departamento de ESI o desde la directiva se pide que se integre”, comentó Nadia Musaubach. “Pero, también existe la otra parte del tabú, por lo que no se aborda de manera transversal en todas las áreas disciplinares y tampoco profundamente; se tratan siempre los mismos temas”, continuó.
En este sentido, se refirió a la “resolución que fomenta una ESI con valores y fundamento científico que cada institución la pueda adaptar”. “Esa ESI enseñaba que los niños no pueden cambiar su identidad de género, que tiene que ir acorde a la biología, entonces consideramos que va hacia atrás”, explicó la integrante de la Red de Educadoras Feministas.
“Queremos que se profundice más en las escuelas, poder pasar la perspectiva de la igualdad de género en todas las materias, porque seguimos teniendo muchas denuncias de acoso, entre jóvenes, entre estudiantes en muchas escuelas”, manifestó Musaubach. “La ESI está diseñada para todos los niveles educativos, inicial, primario, secundario y superior, pero buscamos también una aplicación comunitaria, ya que lo que sucede en las escuelas en realidad pasa en todos lados”, remarcó.
Finalmente, destacó la necesidad de “dar más capacitaciones en violencia de género, en igualdad de género, en identidad y en diversidades, para que la ESI cumpla su función, que es buscar un mundo más igualitario”.
La Educación Sexual Integral contempla el abordaje de cinco ejes: cuidar el cuerpo y la salud, valorar la afectividad, garantizar la equidad de género, respetar la diversidad y ejercer los derechos.