Fuerzas ucranianas atacan un colectivo con civiles en Jerson y dejan al menos cinco muertos
Al menos cinco civiles murieron hoy cuando soldados ucranianos atacaron un colectivo repleto de civiles en la sureña región de Jerson, actualmente bajo contro ruso, donde las fuerzas de Kiev llevan a cabo una contraofensiva, informó un responsable prorruso.
«Combatientes de las fuerzas armadas ucranianas dispararon contra un autobús que transportaba civiles en el punto Darievski que se dirigían al trabajo», escribió en Telegram un funcionario de la administración de ocupación rusa, Kirill Stremousov, en un mensaje en el que precisó que el resultado del ataque fueron cinco muertos y cinco heridos.
El funcionario adjuntó un video en el que se aprecia el colectivo destrozado y otro vehículo dañado en una cola de automóviles.
«Los equipos de ambulancia llegaron rápidamente al lugar y proporcionaron asistencia médica de emergencia a las víctimas», añadió, citado por la agencia de noticias AFP.
El Ministerio de Salud de la región, anexada recientemente por Rusia, indicó también en su cuenta oficial de Telegram que el hecho tuvo lugar a las 7.05 locales (1.05 hora argentina) y advirtió que el balance de víctimas es preliminar.
Asimismo, subrayó que el ataque fue ejecutado con un sistema de cohetes de lanzamiento múltiple (HIMARS), entregados a las fuerzas ucranianas por Estados Unidos, y añadió que hay varios pacientes hospitalizados a causa del impacto de metralla.
Las autoridades ucranianas no se pronunciaron aún sobre el incidente.
Por otra parte, el vicepresidente de la Administración Militar y Civil de Jerson, Kiril Stremusov, denunció en declaraciones a la agencia rusa de noticias Tass la ejecución de 16 personas a manos de las fuerzas ucranianas en la localidad de Velika Aleksandrovka.
«Ahora tenemos información sobre el fusilamiento de 16 personas en Velika Aleksandrovka. Los nazis sacaron a hombres y mujeres sin dar explicaciones, los pusieron contra una pared y los ejecutaron. La gente lo vio con sus propios ojos», señaló.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, promulgó el miércoles los tratados de adhesión de las regiones ucranianas separatistas y rusoparlantes Donetsk y Lugansk, así como de las regiones de Jerson y Zaporiyia, todas ellas ocupadas parcialmente por las fuerzas rusas, y tras sendos referendos realizados hace dos semanas, a pesar de los reclamos de los aliados de Ucrania que impugnan la ilegalidad de las consultas.
Las fuerzas ucranianas están llevando a cabo una contraofensiva en esta región controlada por las rusas desde las primeras semanas de la guerra, y, con ese objetivo, han atacado puentes en la región en varias ocasiones para interrumpir el suministro logístico de las fuerzas rusas.
Los separatistas prorrusos que combaten junto a las fuerzas de Moscú en Ucrania afirmaron hoy que habían capturado tres pueblos cerca de la ciudad de Bajmut, en el este del país.
Según la cuenta de Telegram de los combatientes del bastión separatista de Donetsk, las localidades tomadas son Otradivka, Vesela Dolina y Zaitseve.
El ejército ruso había anunciado ayer la captura de Zaitseve en su informe diario.
Los tres municipios están situados al sur de la ciudad de Bajmut, controlada por las fuerzas ucranianas y que el ejército ruso intenta sin éxito conquistar desde hace meses.
Estas conquistas, sin embargo, se producen en medio de las dificultades que atraviesa el ejército de Rusia a causa de la contraofensiva lanzada por las tropas ucranianas a principios de septiembre que hasta ahora permitió retomar -asegura Kiev- casi toda la región de Jarkov, en el noreste, centenares de kilómetros cuadrados de la sureña Jerson y también la oriental Limán, un importante centro logístico.
El jefe de los separatistas de Donetsk, Denis Pushilin, afirmó hoy que la situación cerca de Limán seguía siendo «la más difícil» en la región y que las tropas rusas estarían construyendo una línea de defensa cerca de Kreminna, más al este.
«El enemigo pone a prueba nuestra línea de defensa día y noche, y podría decirse que la línea del frente se está estabilizando», explicó.
«Creo que tenemos posibilidades de acumular fuerzas y empezar a liberar territorios con nuevas reservas», agregó, anunciando el envío de refuerzos pero sin precisar de dónde provenían ni si se trataba de los reservistas movilizados por Moscú para intentar frenar los múltiples avances ucranianos.