El STJ confirmó una condena contra EME por mala praxis y daños: deberá pagar $1 millón
En una reciente sentencia, el Superior Tribunal de Justicia de Chaco confirmó el fallo de segunda instancia que condenaba a la empresa EME por mala praxis y daños a los consumidores e incrementó el monto que debe pagar por daños punitivos a las personas damnificadas.
El abogado de la parte actora, Nicolás Umansky, destacó el fallo del STJ y relató los pormenores del caso a Diario Chaco. “Es muy importante porque representa un leading case, en el cual el Superior Tribunal de Justicia condena por daños punitivos a una empresa de emergencias médicas. Pero no solo eso, sino también que modifica el monto irrisorio de segunda instancia de 38 mil pesos a 200 mil, más intereses”, resaltó.
Con esto, la empresa deberá pagar $200 mil solamente por daños punitivos, monto que con los intereses asciende a $1 millón, explicó el letrado.
Sobre el proceso judicial, explicó que “el Juzgado Civil y Comercial N° 20 no había hecho lugar al daño punitivo y la Cámara de Apelaciones modificó haciendo lugar al daño punitivo pero por monto ínfimo. Esto es corregido por el Superior Tribunal, que con una sentencia ejemplificadora pone un monto alto, cambia y condena por más monto, y desestima el recurso presentado por la empresa EME”.
“Es sin dudas una sentencia importantísima por cuanto en primer lugar confirma el daño punitivo a una empresa de emergencias médicas, situación que todos los juzgados inferiores deberán seguir y, por otro, es un parámetro a los jueces inferiores que ponen montos irrisorios y el Superior Tribunal de Justicia fundamenta correctamente cómo deben ponerse los daños punitivos”.
Cabe señalar que la demanda fue iniciada por dos hermanas contra la empresa médica y dos médicos de su equipo “por los daños y perjuicios derivados de la muerte de su madre”, ocurrida el 11 de septiembre de 2012.
Según indica el fallo, al que accedió este matutino, la mujer relató que “en la fecha mencionada, su madre sufrió un malestar general, fuertes dolores en el pecho y la espalda, mareos y náuseas, por lo que su hermana llamó al Servicio de Emergencias demandado. Imputó mala praxis médica a los galenos que examinaron a su madre por haber incurrido en error de diagnóstico al considerar que su progenitora padecía dolores musculares y condritis cuando en realidad sufría un infarto de miocardio, no haber realizado electrocardiograma a la misma pese a los insistentes requerimientos para que lo hicieran y no haberla trasladado en ambulancia a un centro asistencial especializado”.
Inclusive, la mujer contó que “tuvieron que cargar a su progenitora, de avanzada edad, para llevarla al Sanatorio Güemes y que al ingresar en dicho nosocomio la misma falleció por un paro cardiorespiratorio. Expresó que si no hubiera sido por el desaprensivo y negligente actuar de los accionados, su madre hubiera estado mucho antes en la unidad coronaria, gozando de los cuidados intensivos que el cuadro requería”.
