El riacho Barranqueras después de 35 años por debajo del metro y medio de altura
Finalizando marzo la bajante histórica de la cuenca del Paraná sufrió un terrible atenuante, las represas hidroeléctricas brasileras decidieron cerrar sus compuertas.
Esta decisión, sumada a la falta de lluvias, profundizó el hecho de que todas las lecturas río abajo tuvieran un marcado descenso. El hidrómetro ubicado en nuestra ciudad marcó en el mediodía del primero de abril 1,41 metros, un número extremadamente bajo que no se registraba desde enero de 1986.
Según un estudio de la Administración Provincial del Agua que refleja las alturas de nuestro riacho desde 1905 esa altura es la más baja del siglo XXI y se encuentra entre una de las más bajas desde que se tiene conocimiento. Si bien no llega a estar por debajo del metro (ocurrió en 1971 por ultima vez) es una altura que impide la navegación de mediano y gran porte.
Fotos: Jorge Tello
Aguas arriba los problemas se agudizan
Si bien la situación tiende a mejorar (Puerto Libertad en Misiones ya registró 1 metro más de altura) la falta de lluvias sumadas a la necesidad imperante de producir electricidad por parte de las represas hidroeléctricas pone en disputa dos recursos esenciales, el agua y la energía. Esta situación tuvo su punto crítico esta semana cuando miles de vecinos de Puerto Iguazú estuvieron por más de cuatro días sin agua potable por el bajo caudal del rio.
Por otro lado, las imágenes capturadas en estos días en Cataratas del Iguazú (cerrado al público por la emergencia sanitaria) son más que elocuentes: