El Nuevo Banco del Chaco alerta sobre estafas bajo la modalidad “phishing”
Recomendaciones del jefe de Protección de Activos de Información de la entidad. “Si alguien cree que pudo ser estafado, puede denunciar a Red Link o al Banco para que le bloqueen la cuenta y por supuesto dar aviso a la Policía”, asegura Pablo Perotti.
El Nuevo Banco del Chaco alertó sobre estafas recurrentes detectadas desde la entidad, entre ellas el phishing (suplantación de identidad). Pablo Perotti, jefe de Protección de Activos de Información, comentó que fueron alertados sobre hackeos a los clientes en los que se roban las credenciales de acceso al home banking y al correo electrónico para perjudicar monetariamente a los clientes de la entidad. «Tenemos reportes de clientes de todas las entidades que están bajo ataque, por eso advertimos a la ciudadanía para que tomen las precauciones necesarias», indicó.
Perotti compartió con la ciudadanía la problemática de las estafas virtuales y explicó una de las modalidades más usadas: el phishing. Así, indicó que los estafadores “utilizan técnicas que juegan con la psicología de la gente”, enviando mensajes alarmistas que llaman la atención “para que la gente caiga en la trampa”.
También explicó que “está bajando la cantidad de personas estafadas”. Esto gracias a las campañas de concientización, el trabajo en conjunto entre la Policía del Chaco y de los medios de comunicación que las difunden. Pero aún existen victimas de estafas y por ello es importante recordar y señalar lo primordial que es denunciarlas.
Ante esto último, Perotti señaló: «Puede ser vergonzoso para una persona; mucha gente no lo revela, pero hay que hacerlo. Si alguien cree que pudo ser estafado, puede denunciar a Red Link o al Banco para que le bloqueen la cuenta y por supuesto dar aviso a la Policía”. “Con esos elementos vemos si podemos avanzar. La velocidad es crucial, cuanto más rápido se hace, aumenta la posibilidad de tener un resultado positivo», concluyó.
El phishing es un método para engañarle y hacer que comparta contraseñas, números de tarjeta de crédito, y otra información confidencial haciéndose pasar por una institución de confianza en un mensaje de correo electrónico o llamada telefónica.
