Dos estudiantes argentinos fueron incluidos entre los 50 más destacados del mundo y buscan ser premiados
Dos estudiantes argentinos fueron seleccionados entre más de 11.000 nominaciones y aplicaciones de 176 países para participar por el Premio Global Chegg 2024. Así, Martina Basgall Sequeira y Ian Godoy Garraza ya forman parte de la lista de los 50 mejores estudiantes del mundo, en reconocimiento a sus logros como jóvenes agentes de cambio.
Con 17 años, Martina Bahiana Basgall Sequeira, estudiante de la Escuela Carlos Pellegrini de Buenos Aires, busca día a día promover la conciencia ambiental. Colabora con organizaciones como Fundación Líderes de Ansenuza, Cruz Roja Argentina y TECHO, además de ser una activista en Jóvenes por el Clima.
Su pasión por el ambiente se intensificó tras su participación en la Escuela de Educadores Ambientales, programa que la inspiró a crear la comisión de ambientalismo en su colegio y llevar a cabo talleres sobre la crisis climática.
Su objetivo, según ella misma reconoce, es promover una educación ambiental integral en las escuelas y la comunidad, con el fin de concientizar sobre el cambio climático y fomentar prácticas sostenibles en la vida cotidiana. Cuando se le pregunta sobre su método de aprendizaje, responde que la empatía es su camino: “Escuchar activamente, involucrarse, salir de la zona de confort y animarse a más, pensando siempre colectivamente”.
Martina fue seleccionada como joven agente de cambio de Ashoka por la iniciativa Tribu 24, donde desarrolla habilidades de agentes de cambio, visibiliza sus acciones y escala su impacto. Recientemente, fue elegida como embajadora de En La Órbita, un programa de Girl Up y UNICEF dedicado a desarrollar materiales educativos sobre la crisis climática, equidad de género y derechos digitales, para fomentar debates entre jóvenes en las aulas y en la comunidad.
Como si fuera poco, Martina fue admitida entre más de 10.000 estudiantes y becada para asistir al programa académico Yale Young Global Scholars. Le apasionan las ciencias políticas y las relaciones internacionales, y sueña con combinar esos caminos en su futuro.
Ian Valentín Gottlieb Godoy Garraza es de La Plata y quedó seleccionado entre los mejores estudiantes del mundo a sus 20 años. Actualmente, estudia Ingeniería Química en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y su objetivo es desarrollar soluciones prácticas y científicas para los problemas globales. A lo largo de su trayectoria, motivó de sus compañeros y contribuyó a formar una comunidad entusiasta que busca construir un país más justo.
Desde los cuatro años, Ian comenzó su formación en danza clásica. Al finalizar la primaria, recibió el premio René Favaloro, reconociéndolo como uno de los mejores estudiantes de su nivel. Más tarde, empezó a practicar natación y -para iniciar sus entrenamientos de alto rendimiento-, se mudó a la capital con sus abuelos. A pesar de las lesiones, logró posicionarse entre los ocho mejores nadadores del país.
Ian recibió reconocimientos en el modelo intercolegial de las Naciones Unidas y, junto a sus compañeros, ganó dos años consecutivos la instancia local del NASA Space Apps Challenge. En este concurso, desarrollaron proyectos innovadores, como una aplicación para la detección y monitoreo de incendios en la Argentina, que también fomenta la participación ciudadana.
El chico de 20 años anima a otros a “soñar lo más alto posible e idear ese camino. Saber disfrutar cada paso que damos y ser felices en el proceso. El pasado no nos define; son las decisiones que tomamos hoy y la forma en que enfrentamos los desafíos las que nos ayudarán a forjar el futuro que deseamos”.
Agustín Porres, director regional de Fundación Varkey expresó: “Tenemos que poner el aprendizaje de los estudiantes en el centro de cualquier esfuerzo educativo y cualquier decisión que tomemos tiene que ir hacia allí. Por esa razón, ofrecer y recibir lo mejor, es clave conocerlos y reconocerlos”.
Heather Hatlo Porter, directora de Comunicaciones de Chegg, dijo: “Felicitaciones enormes a Martina e Ian. Chegg no solo celebra sus logros, sino también las infinitas posibilidades que existen cuando las mentes jóvenes están impulsadas por una pasión por el cambio. Los 50 finalistas del Premio Global para Estudiantes merecen la oportunidad de contar sus historias y hacer oír sus voces. Después de todo, son sus sueños, ideas e ingenio los que iluminarán un futuro más esperanzador”.
Por su parte, Sunny Varkey, Fundador de la Fundación Varkey, expresó: “Las historias de estos chicos son un testimonio del papel crucial que la educación desempeña en la construcción de un mundo mejor para todos nosotros. A medida que se agota el tiempo para lograr los objetivos de desarrollo sostenible, es más importante que nunca priorizar la educación para que podamos enfrentar el futuro con confianza”.
Las aplicaciones cerraron el domingo 5 de mayo. Los estudiantes están siendo evaluados en función de su logro académico, impacto en sus compañeros, cómo marcan la diferencia en su comunidad y más allá, cómo superan las adversidades para lograr sus objetivos, cómo demuestran creatividad e innovación, y cómo operan como ciudadanos globales. Se espera que los 10 finalistas sean anunciados en septiembre de este año.