Espectaculo

Curiosidades de las películas argentinas nominadas a los premios Oscar

“Argentina, 1985” es la octava película argentina nominada a los premios que entrega la Academia de Hollywood, en el rubro de mejor película extranjera, en una serie que comenzó en 1975, con “La Tregua”. De ellas, dos resultaron premiadas: “La historia oficial” y “El secreto de sus ojos”. Pero cada una tiene curiosidades para contar.

“La tregua” (1975)

Dirigida por Sergio Renán -quien también hace una breve aparición- y basada en una novela del uruguayo Mario Benedetti. Es la historia de amor de un hombre maduro, compuesta por Héctor Alterio, con una mujer joven, interpretada por Ana María Picchio. Norma Aleandro, Luis Brandoni y Oscar Martínez conforman personajes secundarios. Perdió nada menos que con Amarcord, la recordada producción italo-francesa de Federico Fellini. Fue la segunda película sudamericana en ser nominada, luego de la brasileña The Promise Payer (1962). Cuando se estrenó, la violencia política fue tal que obligó a suspender la entrega del Cóndor de Plata, donde era amplio favorito.

“Camila” (1985)

Dirigida por María Luisa Bemberg y protagonizada por Susú Pecoraro, Imanol Arias y Alterio. Histórico y no exento de polémica, aborda el romance prohibido entre la aristócrata Camila O’Gorman (Pecoraro) y el sacerdote Ladislao Gutiérrez (Arias) durante el gobierno de Juan Manuel de Rosas en la primera mitad del siglo XIX. Perdió ante una producción suiza, «La diagonal del tonto», que relata un partido por el título mundial de ajedrez entre dos jugadores soviéticos. Se dijo que Bemberg se basó en la versión del mitrismo, que culpa a Rosas de la ejecución de Ladislao y Camila. La corriente revisionista indica que el propio padre de Camila, Adolfo O’Gorman, exigió un “castigo ejemplar” para ambos. Rosas encargó un dictamen a los juristas Dalmacio Vélez Sársfield, Lorenzo Torres, Baldomero García y Eduardo Lahitte, y la respuesta fue condenatoria. Rosas no aparece en ningún momento, salvo en múltiples retratos. Durante su fuga, el padre Ladislao y Camila practican sexo dentro de un carruaje tirado por caballos, en una escena que parece inspirada en la que cuenta en «Madame Bovary» de Gustave Flaubert.

«La historia oficial» (1986)

Luis Puenzo comenzó a filmar en estricto secreto en 1983, el último año de la dictadura militar. Fue la revancha de Alterio y Aleandro tras «La trugua» y el primer Oscar para Argentina y Latinoamérica. Es la historia de una profesora de historia que comienza a tomar conciencia de lo sucedido en esos años de plomo, cuando sospecha del origen de su hija adoptiva. Para Aleandro significó actuar de nuevo en el país tras el exilio en España. La entrega se produjo el 24 de marzo de 1986, misma fecha del golpe de Estado hace diez años, y que hoy se conmemora el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. La actriz pensó que no ganaría, ya que tenía que presentar ese artículo. Y luego también leyó el sobre, ya que estaba en inglés. Ella “estaba acostumbrada a The Official Story; No pensé que estaba en inglés. Cuando me di cuenta dije el famoso ‘Dios te bendiga’, que me salió del alma”, relató.

“Tango, nunca me dejes” (1999)

La cuarta nominación al Oscar fue una coproducción entre Argentina y España, escrita y dirigida por Carlos Saura y protagonizada por Miguel Ángel Solá y Mía Maestro. Mario Suárez (Solá) es un director de cine que atraviesa una depresión luego de que su esposa lo dejara. Para recuperarse, se refugia en la película que está rodando sobre el tango, y se enamora del protagonista (Maestro), un bailarín cuyo novio es un mafioso que invirtió dinero en la producción. Esta historia, que se desdibuja entre la realidad y la ficción, acabó perdiendo ante un «tanque» como «La vida es bella», de Roberto Benigni, que celebró saltando por los asientos. Allí, Benigni interpreta a un judío italiano que debe usar su imaginación para proteger a su pequeño hijo de los horrores de un campo de concentración nazi.

«El hijo de la novia» (2002)

Dirigida por Juan José Campanella, contó con Darín, Alterio y Aleandro. Darín, en su primer acercamiento a los Oscar, es un hombre de mediana edad abrumado por las obligaciones y que se topa con la aspiración de su madre (Aleandro), que padece Alzheimer, de casarse por la iglesia. Esto lo obliga a reformular su propia vida. Esta historia fue comparada con la de la actriz chilena María Cánepa, quien se casó con su pareja de tres décadas, a los 86 años, también con visos de Alzheimer. Éxito de crítica y taquilla, y una sonrisa tras la crisis política de 2001, que perdió con «Tierra de nadie», que aborda el conflicto de los Balcanes.

«El secreto de sus ojos» (2010)

Campanella se tomó la revancha ocho años después, nuevamente en pareja con Darín, y basada en el libro La pregunta de sus ojos, de Eduardo Sacheri. Acompañaron a Soledad Villamil, Pablo Rago y un sorprendente Guillermo Francella. Darín es un oficial del Juzgado de Instrucción recién retirado que quiere escribir una novela sobre un asesinato ocurrido en 1974, del cual fue testigo. Destacan la violencia política y la vida cotidiana de los porteños durante la dictadura militar. Quizás la escena más recordada sea la de Darín y Francella en la cancha de Huracán, buscando atrapar al criminal. Campanella recibió el Oscar de manos de Pedro Almodóvar y Quentin Tarantino, nada menos. Jocoso, agradeció que “Na’vi” no haya sido considerado como un “idioma extranjero”. La referencia era a la cantidad de premios otorgados en esa edición a Avatar.

«Cuentos salvajes» (2015)

A diferencia de los anteriores nominados, esta película de Damián Szifrón fue una recopilación de seis historias, con un elenco coral, con toques de comedia y humor negro. Participaron Darín, Oscar Martínez, Leonardo Sbaraglia, Érica Rivas, Rita Cortese, Julieta Zylberberg y Darío Grandinetti. Sin embargo, el premio quedó en manos de “Ida”, de origen polaco que cuenta la historia de una novicia que, a punto de tomar los votos, conoce su origen judío y su verdadero nombre. Relatos salvajes, con casi 450.000 espectadores en su primera semana de proyección, se convirtió en la película argentina más vista de la historia. Aunque son historias independientes, se entroncan en la “frontera difusa que separa la civilización de la barbarie, del vértigo de perder los estribos y del innegable placer de perder el control”, definió Szifrón. La mayoría recuerda a «Bombita», el personaje de Darín, un ingeniero experto en explosivos que decide «ejecutar» un fino centro en el microcentro porteño.

“Argentina, 1985” (2023)

Drama histórico dirigido por Santiago Mitre, que vuelve a tener como tema la última dictadura, en este caso el juicio a las Juntas llevado a cabo por el fiscal Julio César Strassera. Darín está acompañado por Peter Lanzani (fiscal adjunto Luis Moreno Ocampo), Alejandra Flechner y Norman Briski. Se enmarca en los primeros años del gobierno de Raúl Alfonsín, quien no aparece en la película, pero sí su voz, en un breve diálogo con Darín-Strassera. La película se permite momentos de humor. El momento culminante: el “nunca más” del fiscal. Lo conmovedor: los aplausos en las salas donde se exhibió.

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