River venció a Boca por 2 a 0 con goles de Borré- de penal y a instancias del VAR- y de Nacho Fernández. El “Millo” fue superior, marcó diferencias físicas y futbolísticas y ahora irá a la Bombonera con una ventaja importantísima. El sueño de River de jugar una nueva final de Libertadores, está al caer. Boca, defensivo y sin ideas, comenzó a perder el partido tras el penal que, de manera infantil, Más le cometió a Borré.
Por la primera semifinal de la Copa Libertadores de América, River venció a Boca en el Monumental por 2 a 0. Los goles tuvieron la firma de Borré- de penal- y de Nacho Fernández. Los de Gallardo superaron claramente a los de Alfaro. Ahora, la revancha será en la Bombonera el 22 de octubre y el “Millonario” tiene un pie y medio en la final de Santiago de Chile.
Fue todo a pedir de River. Desde el arranque, el Millonario fue hacia adelante en búsqueda de dominar el partido. Lo consiguió. Muy rápido. Por intermedio del VAR- correctamente utilizado- el árbitro brasilero cobró un penal que Emanuel Más le cometió a Borré, tras un remate en el que Andrada dio rebote y allí, se produjo la falta. El propio Rafael Borré cambió la pena máxima por gol y en tres minutos, los de Gallardo ya estaban arriba en el marcador.
Esta jugada partió el partido. Boca sintió el golpe y le costó volver a entrar en juego. El dominio riverplatense se acrecentó aunque en ningún momento logró arrinconar a su rival. Los minutos pasaron y el desgate permitió al Xeneize pararse mejor y de a poco, emparejó.
Boca, claramente, estaba parado para salir en velocidad y tratar de aprovechar errores del local. Lo tuvo. Dos veces en todo el primer tiempo. Primero un remate de larga distancia de Mac Alister que exigió a Armani y luego un mano a mano tremendo que el pibe Capaldo, solito, la tiró por las nubes casi debajo del arco.
En la segunda parte vino lo mejor de River. Claramente convencido en aumentar el marcador, empezó a soltar a sus mediocampistas logrando el crecimiento individual de Nacho Fernández. La cancha se inclinó y Boca volvió a ser ese equipo retrasado que aguanta. Pero no le duró mucho la solvencia en defensa.
Gallardo mandó a la cancha a Scocco en lugar de Borré y allí todo pasó a ser a pedir de River. En una jugada colectiva muy buena, el “Millo” encontró profundidad por el costado derecho de su ataque, con un centro al corazón del área chica que encontró a Fernández, que entró a la carrera, para mandar a morir el balón bajo el techo de piolas. El 2 a 0, a esas alturas, estaba merecido.
Con el dominio en el juego y también en el marcador, River puso a Boca en Jaque en más de una vez. El “Xeneize” no pudo reaccionar y sólo incomodó a Armani, que volvió a exigirse para mandar un remate nuevamente al córner, en una sola ocación.
River fue superior a Boca física y mentalmente a lo largo de los 90 minutos. El “Xeneize” se quedó sin ideas tan pronto como el VAR estableció el penal al inicio del partido. El “Millo” logró una diferencia numérica pensando en el desquite en la Bombonera. El 2 a 0, podría llegar a ser definitivo en el futuro de la serie.
