Consejo de la Hidrovía Paraná- Paraguay: Capitanich bregó por una “logística integrada federal” que potencie las cadenas de valor
El gobernador Jorge Capitanich participó en Rosario de la asamblea del Consejo Federal de la Hidrovía Paraná- Paraguay, oportunidad en la que hizo mención a la agenda de trabajo que llevan adelante conjuntamente los 10 gobernadores del Norte Grande y que será trabajada el próximo 25 de febrero, en el marco del natalicio de José de San Martín.
“Le damos una importancia clave y estratégica porque entendemos que la Hidrovía Paraná- Paraguay forma parte de un entramado logístico para la integración del corredor Bioceánico Norte”, recalcó. “La Hidrovía forma parte de una discusión estratégica y geopolítica”, dijo e hizo mención a “un gran conflicto en la organización nacional” a lo largo de la historia argentina.
“Tuvimos un reglamento orgánico en 1811, un estatuto provisional en 1812, en 1815, 1817. Tuvimos dos constituciones fallidas hasta llegar efectivamente al consenso de 1853” y posteriormente las reformas incluida la del 94.
“Eso estuvo signado por tres conflictos estratégicos desde el punto de vista federal”, aseveró y mencionó la renta aduanera “principal fuente de financiamiento” y todas las disputas surgidas en su entorno que, incluso, implicaron tratados provinciales. “Todos fueron jalones de un proceso de lucha y al ser la principal fuente de financiamiento implicaba la posibilidad de sostener o no el desenvolvimiento autónomo de las provincias argentinas”.
Un segundo conflicto al que hizo mención en su discurso tuvo que ver con la libre navegabilidad de los ríos interiores que se plantea en el artículo 26 de la Constitución de 1853 que plantea que “el río es libre para todas las banderas con sujeción únicamente a los reglamentos que dicta la autoridad nacional. Ahí es donde empezamos a discutir el tema del río como dominio originario de las provincias argentinas y también el canal de navegación para la regulación de este proceso de concesión”.
“Renta aduanera es un tema que formó parte de las tensiones entre unitarios y federales, entre el Puerto de Buenos Aires y las provincias argentinas. Libre navegabilidad también fue parte de un proceso de acumulación de capital y estrategia de desarrollo de nuestras provincias. Tercero, la administración portuaria. Eso generó una asimetría extremadamente profunda. Se desarrolló el Puerto de Buenos Aires integrado a un sistema de inserción económicamente mundial y las provincias argentinas fuimos excluidas y en virtud de ello no tuvimos la capacidad de inversiones, acumulación de capital y desarrollo estratégico de base productiva. Esto implicó también el monopolio de la política exterior y de acuerdos internacionales”, planteó.
Habló de su participación como gobernador de Chaco en ese ámbito y lo asimiló a una “reivindicación histórica” en el sentido del anhelo de participar “en la regulación de la libre navegabilidad de nuestros ríos, en la organización del sistema portuario porque a partir de 2021 y 2022 vamos a tener dos puertos estratégicos, el de Las Palmas y el de Barranqueras”. Reconoció que también Formosa, Corrientes, Misiones, como cualquier otro distrito, defenderá su participación en la discusión.
Y apeló: “Nosotros tenemos que garantizar que todo el sistema de embarque de nuestras economías regionales se haga a través del fortalecimiento de nuestros puertos para utilizar un nuevo concepto de logística integrada. No el de carácter extractivista que promueve la concentración de las corporaciones multinacionales que se apropian de los excedentes sino una logística integrada de base federal que promueva intercambio de flujo comercial de exportaciones e importaciones, que abarate el proceso productivo de la generación de valor agregado de nuestras cadenas de valor que potencia las exportaciones y genere recursos y excedentes para nosotros”, apuntó.
Aseguró que hoy el 90% de los recursos salen en transporte terrestre y no fluvial.
Propuso en ese ámbito una serie de puntos a abordar: una reformulación del tratado que rige por sobre los 3442 kilómetros de extensión, que atraviesa a cinco países.
Planteó entonces una revisión del protocolo adicional sobre cadenas de igualdad de oportunidades para mayor competitividad, criterios comunes de compatibilidad, criterios homogéneos de importación de embarcaciones, los incentivos fiscales de los armadores, las estrategias de seguridad homogénea entre países signatarios, la reválida de títulos de capacitaciones, el tratado diferencial de combustibles y lubricantes, la no aplicación de tasas y servicios sin contraprestación, la simplificación de servicios portuarios, la uniformidad de horarios, trámites y operaciones y la liberalización de contrataciones de manos de obras.
Explicó que existen “profundas asimetrías entre los países signatarios (…), de manera que nosotros tenemos una hidrovía que de los 3442, 1615 kilómetros es de recorrido en Argentina. Si bien existe una macroconcentración en la Pampa Húmeda, lo que tememos que exigir a todos los países es un modelo de balizamiento, señalización y dragado. Dentro de la República Argentina el fortalecimiento estratégico de nuestros puertos fluviales, la obligatoriedad de embarque y una logística integrada de sentido y alcance federal que promueva la potenciación de las cadenas de valor. Eso es una definición estratégica y forma parte de una negociación con los países signatarios del tratado dentro de la capacidad de consenso que tenemos que tener dentro de las provincias argentinas. No lo hacemos en detrimento de nadie, muy por el contrario, es para potenciar a todas las provincias argentinas”, apuntó.
Previo a su alocución, el mandatario chaqueño agradeció a quienes oficiaron de anfitriones, así como al resto de los gobernadores y a los funcionarios nacionales que participaron de la convocatoria.