Conmoción en Mendoza: encontraron el cuerpo de un hombre mientras sus perros se lo estaban comiendo
Las alertas de los vecinos del barrio de Parque Norte en la localidad mendocina de Maipú se encendieron cuando comenzaron a sentir un olor nauseabundo que provenía de una de las casas al interior de un complejo.
Luego de avisar a las autoridades, la Policía llegó al lugar y se encontró con una escena escalofriante: el cuerpo de un hombre fue hallado en un estado avanzado de descomposición, mientras sus perros se lo estaban comiendo.
Según las fuentes policiales, los efectivos acudieron al domicilio y encontraron el cadáver postrado en la cama de una de las habitaciones. Con el testimonio de los residentes de la zona, la víctima fue identificada como Pedro Roberto Andrade, tenía 55 años y, según los testimonios, vivía solo. La preocupación había surgido, además de sentir el olor, por el hecho de que nadie lo había visto desde el lunes pasado.
En la causa, intervino la fiscal de Homicidios, Andrea Lazo, quien lideró las investigaciones y llegó a determinar que el hombre sufría de diabetes y psoriasis, por lo cual se cree, en principio, que la causa de la muerte pudo haber sido por falta de atención médica.
Si bien las primeras averiguaciones indican una muerte natural, se ordenaron los peritajes correspondientes para confirmar las circunstancias exactas del fallecimiento.
Un hecho similar ocurrió esta semana en una zona rural cercana a Pirenópolis, en Brasil, luego de que se descubriera los restos óseos de un expolicía de 53 años que, aparentemente, murió de manera repentina. La víctima se trata de Clédio Vilela Cardoso y se cree que su cadáver fue devorado por sus propios perros.
Según informaron los efectivos, los huesos fueron encontrados este domingo por un grupo de amigos que dejaron de verlo en las misas de los domingos de la Iglesia y se preocuparon por su ausencia. Asimismo, el hombre se encontraba de luto por una pérdida familiar: “Vivía solo en una finca alejada de la ciudad, aislada y de difícil acceso”, contó Tibério Martins, el jefe de policía que se encuentra trabajando en el caso.
Se estima que los animales estuvieron sin comer durante al menos dos semanas después del fallecimiento de Cardoso, aunque aún no lograron corroborarlo. “Es probable que los perros se comieran el cuerpo por hambre”, añadió Martins.