Colombia se prepara para despedir al artista Fernando Botero
El velatorio del artista Fernando Botero, quien falleció el viernes último a los 91 años, se realizará, tal cual su deseo expresado en vida, en Colombia, donde será homenajeado como uno de los pintores y escultores más relevantes del siglo XX, antes de su sepelio en Italia, informó su familia.
«Llevaremos a mi padre a Colombia para un despido final, inicialmente a Bogotá, después a Medellín» (noroeste), dijo Juan Carlos Botero, uno de sus hijos, a la emisora colombiana Blu Radio.
Botero falleció el viernes último en su residencia de Mónaco tras el empeoramiento de su estado de salud producto de una neumonía. «Estamos haciendo todo lo que hay que hacer para cumplir sus últimas voluntades. Él quería despedirse de su gente; vivía agradecido con el pueblo de Colombia», sostuvo el hijo del artista.
De acuerdo con lo previsto, los restos de Botero llegarán este jueves a la ciudad de Bogotá y, desde el viernes a la mañana, se abrirán las puertas del Capitolio Nacional para que, quienes quieran despedirlo, «lo hagan tranquila y libremente», informó el presidente del Congreso, Iván Name, en un comunicado citado por medios locales.
En tanto, el próximo lunes sus allegados realizarán una misa católica y posteriormente el cuerpo de Botero será trasladado a su ciudad natal, Medellín, donde se espera que se celebren varios homenajes en memoria del pintor y escultor colombiano más famoso en el mundo, consignó la agencia de noticias AFP.
Botero es muy querido en Medellín porque, durante su trayectoria artística, manifestó su intención de acercar el arte a las clases populares, y donó decenas de obras a museos y parques públicos. Además, retrató la historia de la ciudad, golpeada a fines del siglo pasado por el narcotráfico.
«Él nunca pidió un homenaje» pero «es entendible que la gente quiera despedirse de él y él quería despedirse de su gente», sostuvo Juan Carlos Botero, uno de los cuatro hijos del artista.
Tras el velatorio en Colombia, su cuerpo será cremado y viajará al pequeño poblado italiano de Pietrasanta, donde será sepultado al lado de su esposa, la artista griega Sophia Vari, fallecida en mayo pasado.
Junto al Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, Botero fue uno de los colombianos más famosos a nivel mundial. Sus creaciones, de formas voluptuosas y ligeramente surrealistas, fueron subastadas hasta por 4,3 millones de dólares en las galerías más prestigiosas de ciudades como Nueva York o Londres.
Su hija, Lina Botero, contó a los medios que siguió pintando en acuarela hasta sus últimos días, aunque «no al óleo porque le costaba mucho trabajo estar de pie». El día de su deceso, Medellín decretó siete días de luto.
Las pinturas y esculturas de Botero están expuestas en Madrid, París, Barcelona, Singapur y Venecia, entre otras ciudades.
Fuente: Télam