Chaco, provincia pionera en la ley laboral de inclusión laboral travesti-trans
El 14 de noviembre de 2018 fue sancionada de forma unánime por la Legislatura chaqueña la ley provincial Nº 2934-L de inclusión laboral trans-travesti-transgénero. Su reglamentación provino tres años después con la firma del Decreto de la vicegobernadora Analía Rach Quiroga, ferviente defensora de los derechos de las mujeres y las comunidades LGTBQI+.
Fue en febrero del año pasado cuando el Chaco avanzó en el reconocimiento efectivo del derecho de las personas travesti trans de la mano de la Secretaría de Derechos Humanos y Géneros del gobierno provincial, su autoridad de aplicación, junto al Ministerio Producción, Industria y Empleo y los organismos pertinentes.
La directora del área de Diversidad Disidencia Sexual e Identidad de Género, Úrsula Sabarece, dialogó con Agencia FOCO para brindar detalles de la ley. El Estado tiene -a la fecha y en sus distintas formas de contratacion- a tres personas en Desarrollo Social; dos en la Secretaría de DD.HH. y Género; dos en el hospital Perrando (personal de planta permanente que ingresó antes de la sanción de la Ley); dos en la Municipialidad de Resistencia; una el municipio de Charata, una en la de Barranqueras y otra en la de Sáenz Peña (ingresó antes de la Ley). A su vez, en la Legislatura provincial también se encuentran dos personas, así como en Vialidad Provincial y en la ANSES. También han contratado personal travesti-trans organismos públicos como SECHEEP y SAMEEP; y una más en el Comité contra la Tortura. Entre los entes autárquicos que también apostaron a la inclusión se encuentra el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) quienes hicieron un llamado convocando a personal. Además, el sector privado -según afirmó la directora- también ha incorpado personal.
A diferencia de la ley nacional (ley de promoción del acceso al empleo formal para personas travestis, transexuales y transgénero “diana sacayán – lohana berkins”), más conocida como ley de «cupo laboral trans», la provincial -pionera- no tiene porcentaje de contratación. Es decir, no obliga a los organismos estatales a contratar personal y cumplir un cupo, sino que los insta a generar herramientas de empleo hacia la población específica. Además, Chaco es una de las pocas provincias que tiene una ley tan importante en materia de inclusión.
Es que, cuando hablamos de inclusión, se evita hablar de obligaciones, de números específicos de cantidades, sino que configura como una cuestión más bien moral, de empatía y de derechos humanos. Para ello, la ley provincial viene a instar al Estado, a promover ni más ni menos que un derecho básico: el empleo. La ley viene a romper con ello, pero tal como afirma Úrsula «es un proceso» y uno largo porque no sólo implica la contratación del personal sino crear el ambiente específico para su desempeño, para su desarrollo y para su crecimiento laboral. «Es en lo que se está trabajando para transformar esas realidades de las y los que deseen, pero es el Estado quien debe garantizar y generar este proceso cultural», agrega.
Tras su reglamentación se creó el «Registro Berkins” (en homenaje a la referente Lohana Berkins, militante histórica por la inclusión laboral de las personas trans). Se trata de un registro público de aspirantes donde quedan asentadas las postulaciones de las personas que desean ingresar al Estado, además, garantiza el principio de confidencialidad.
Ayuda asimismo a tener un registro, algo que tampoco existe en Argentina: «En las provincias no hay un relevamiento real, hay situaciones de pruebas como en la matanza, donde se realizó uno» y con ello se «acortan las brechas que hoy siguen existiendo. Eso es a lo que apunta la ley», comenta. A su vez, la directora del área reconoció: «Se genera un proceso que tiene que ver más con lo cultural y con una cuestión de ir generando estos espacios».
Espacios que también tienen que ver con romper con la cotidianeidad de las poblaciones travesti-trans, tanto en lo social como en lo cultural, laboral y educacional, es decir todos los sectores que se les fueron negado siempre. Ya que, tal como explicó Úrsula «muchas compañeras no han terminado la primaria, entonces esto es para generar todas estas cuestiones e ir incorporando a estas poblaciones dentro de un sistema formal. Hoy se generó esta herramienta también de empleo diversidad para que tengamos un acompañamiento desde el Gobierno, desde el empleo, desde la Secretaría, es un acompañamiento también para la no deserción laboral».
Para ello, desde la Secretaría en la que forma parte, Úrsula precisó: «Conformamos un equipo que está trabajando para ir generando estos perfiles y acompañando en el caso de que las empresas que tienen convenios con el Estado pueda digamos generar el registro, el ambiente propicio y el espacio de inclusión», y agregó que «hay una barrera cultural de esta cuestión de reconocernos como identidades travesti trans en el ámbito laboral».
El Gobierno provincial, a través de dicha ley, tiene en cuenta las carencias a costa de la exclusión y por ello, mediante su reglamentación se establece que el requisito de idoneidad para el cargo “será interpretado siempre en favor de las personas travestis, transexuales y transgénero beneficiarias y no será un impedimento para que el Estado cumpla con el deber establecido”. Mientras que para quienes no reúnan dichas condiciones se dispondrá un régimen especial de capacitación laboral, con el fin de garantizar su efectiva inserción laboral. «La empresa y el Estado no puede pedir idoneidad a nosotras, porque en realidad, nunca vamos a tener porque nunca experimentamos eso, entonces, se excluye de ese requisito», concluye.
Ámbito privado
Como el Estado no puede obligar al ámbito privado, la reglamentación propuso beneficios impositivos para quienes contraten personal travesti-trans. Se trata de una desgravación en el impuesto a los Ingresos Brutos para las empresas privadas que contraten travestis, transexuales y transgénero, de conformidad con lo que la Administración Tributaria Provincial (ATP)
«Estado tiene que también brindarla -al organismo que contrate- las herramientas para que tanto la persona que ingrese y todo el resto de la gente que está trabajando en el lugar realice una especie de capacitación para la no discriminación en el ámbito laboral, no violento. Eso es lo que hace el Estado, crea esos espacios y por eso estamos nosotras para ir acompañando al equipo y para que no haya una deserción en el campo laboral, es decir, que tanto la persona que ingresa al trabajo no tenga luego que atravesar un abandono», explicó en comunicación con Agencia FOCO.
A su vez, aseveró: «Es una población que jamás tuvo la posibilidad de tener un trabajo, ni tampoco otras formaciones educativas, claro que es una cuestión que va en proceso, lo que debemos hacer desde el estado es acompañar, ser el ente regulador». “Úrsula señaló asimismo que hay abandono a raíz de esa incomodidad que tiene que ver con esta cuestión de una paciencia, una cuestión de inserción que carece”, y amplió “hay que capacitar entonces al personal porque si no, puede resultar un ambiente violento y discriminador porque además nosotras también venimos de un sector que nunca estuvo dentro de ningún sistema”, cerró.