Capitanich: “Para la renovación dirigencial, se deben afianzar oportunidades a nuevas generaciones”

El gobernador Jorge Capitanich recogió el concepto de “trasvasamiento generacional” para referirse a la necesidad de renovación en los perfiles de quienes sean electos para ocupar los cargos vacantes en la Defensoría del Pueblo. Analizó también la diversidad en la integración del bloque oficialista, y aseguró que “la dinámica social, también induce a una transformación similar política”, por lo que reconoció que “la capacidad de construir consensos es cada vez más compleja”.

El gobernador respondió sobre la elección del Defensor del Pueblo y su Adjunto, definición sobre la que había planteado, con anterioridad, la necesidad de renovar el perfil de quienes ocupen los cargos del organismo autárquico.

Se reconoció “respetuoso” en cuanto a la responsabilidad que les cabe a los parlamentarios chaqueños, para “adoptar la decisión que corresponde”, por lo que se autodefinió como “prescindible” para dicho “proceso de selección”.

Ratificó su postura en cuanto propiciar mecanismos de selección a través de concursos de antecedentes y oposición, en todo organismo de carácter constitucional que, como en la Defensoría del Pueblo, se dan en la Fiscalía de Estado o Contaduría y Tesorería de la Provincia. Y aseguró que, “en temas de renovaciones dirigenciales, siempre planteo que uno lo que debe recrear son oportunidades para que existan nuevas generaciones; lo que siempre se decía en la década del 70, trasvasamiento generacional”.

Desde esa perspectiva, asumió que se deben “conformar cuadros políticos”, para el ejercicio de responsabilidad de conducción del Estado, que requiere de “fundamentos de carácter filosóficos, ideológicos, doctrinarios; rapidez, disciplina, capacidad, formación en el campo de la competencia correspondiente”. “Creo que la administración del Estado tiene particularidades esenciales en la vinculación con la ciudadanía y la especial sensibilidad respecto a la conexión que hay que tener con cada uno de los vecinos y vecina”, subrayó.

“¿Qué recomendación hace uno a alguien que quiere hacer política? Primero, ojos que no ven, corazón que no siente; entonces, lo primero que tiene que hacer es conocer el territorio. No se trata de conocer el barrio de la esquina sino 99.633 kilómetros2, al hombre de campo y de ciudad, al pueblo y la capital, al docente y al policía; cómo piensa cada uno. Pero eso significa que primero hay que conocer el territorio, para conocer los actores, las personas de carne y hueso que lo habitan. Si uno conoce el territorio y a las personas, conoce sus problemas y así puede aproximarse a la solución”, afirmó.

El mandatario chaqueño aseguró que es imposible, materialmente, que alguien en el gobierno “reciba todos los problemas”. “Como bien decía Perón, la política se comprende, no se aprende. Porque consiste en un conjunto concatenado de hechos que ocurren en forma sistemática, cuando uno busca las respuestas, te van cambiando las preguntas. Entonces, es muy difícil resolver todos los problemas que emergen en forma permanente. Lo que yo diría es que la renovación es necesaria ejecutarla, pero también generar procesos de oportunidades para que puedan ejercer responsabilidades públicas con menor edad posible, aunque no es garantía de nada”.

“La renovación en sí misma, generacional, no es garantía de nada. Es un elemento que implica generar condiciones para que podamos tener permanente calidad en el ejercicio de la acción. Lo mejor que a uno le puede pasar es que, los que lo sucedan sean mucho mejores que uno”, sostuvo el mandatario.

Oficialismo legislativo: ”Unidad en la diversidad y construcción de consensos”

Consultado por la evaluación en cuanto al rol que asumieron los legisladores que conformaron el Frente Chaqueño a partir del 10 de diciembre de 2019, reconoció en principio “la pluralidad y diversidad”.

“La unidad dentro de la diversidad significa que no necesariamente existan acuerdos en muchas cuestiones. Obviamente, la mayor apertura implica mayor homogeneidad que, a su vez, implica mayores dificultades para la obtención de consensos. Eso también requiere tiempo y conducir una agenda que permita mayores consensos. Pero forma parte de la heterogeneidad de la composición social. Esto se ve en todos los lugares del mundo”, aseguró.

Trazó una analogía con el escenario que en ese mismo sentido se plantea en Estados Unidos, donde se mantenía una participación promedio del 40% y 41% de la ciudadanía, que ahora es del 70%, “el presidente con mayor número de votos, una elección hipercompetitiva”. “Y, uno observa claramente que las nuevas generaciones de hispanos tienen otro comportamiento respecto a las viejas; lo mismo la composición de afroamericans. Todo lo que era el voto democrático también va cambiando”.

“Lo que quiero transmitir con esto es que la dinámica social, también induce a una transformación de la dinámica política. Entonces, la capacidad de construir consensos es cada vez más compleja”, apuntó.

Habló de “sectores radicalizados” que pretenden vivir en una sociedad sin conflictos, lo que desde su punto de vista “es absolutamente imposible con tensiones sociales y desigualdades estructurales y crónicas de ingresos”. “El orden público es un bien asequible por la sociedad, pero muchas veces está basado, como orden jurídico, en un orden justo. Muchas tensiones prevalecen. Es muy compleja la administración del Estado con la de recursos y presupuesto para atender las demandas”.

Para Jorge Capitanich, el problema central es que no hay soluciones óptimas frente a combinaciones múltiples. “No es una cuestión fácil a resolver. Cada decisión que se adopta tiene efectos y consecuencias”.

Reconoció, desde ese punto de vista, que dentro del bloque oficialista pueden haber opiniones no compartidas y aseguró: “Yo estoy siempre abierto porque entiendo que en esta etapa es absolutamente imprescindible sostener la unidad en la diversidad, que es necesario el diálogo como herramienta para la obtención de consensos, aunque el consenso no llegue; que tenemos que ser capaces de respetar la pluralidad, la democracia, y generar las condiciones para que el orden público garantice el derecho de toda la ciudadanía”.

“Es complejo, no es fácil, es muy dinámico, cambiante, pero uno tiene que tener la mayor apertura posible”, concluyó.

Fuente: Chaco Dia por Dia.