Cancilleres de Rusia y Ucrania acuden con poca expectativa a su primera reunión
Rusia y Ucrania dejaron ver este miércoles, en el decimocuarto día de la invasión ordenada por Moscú a su nación vecina, señales de moderadas expectativas respecto del resultado que podría arrojar el encuentro de este jueves entre sus cancilleres, la reunión de más alto nivel desde el inicio del conflicto.
El jefe de la diplomacia rusa, Serguei Lavrov, y su homólogo ucraniano, Dmitri Kuleba, se verán las caras en la ciudad balnearia de Antalya, sur de Turquía, país que intentará a través de su ministro de Relaciones Exteriores, Mevlut Cavusoglu, oficiar de mediador.
El presidente de esa nación, Recep Tayyip Erdogan, que ha multiplicado los esfuerzos de mediación desde el inicio de la crisis, se felicitó de que Turquía «puede hablar a la vez con Rusia y con Ucrania».
«Trabajamos para evitar que la crisis se transforme en tragedia» insistió el mandatario del país, miembro de la OTAN, que le suministra drones de combate a Kiev pero al mismo tiempo preserva sus relaciones con Moscú, de la que depende estrechamente para sus suministros de energía y trigo, además del turismo.
El canciller alemán, Olaf Scholz, manifestó que espera que la reunión entre cancilleres «logre un resultado» para «encontrar una manera de salir de esta situación», aunque del lado ucraniano no se demostró tanto optimismo.
El canciller Kuleba aseguró en un video en Facebook que hará todo para que las «conversaciones sean lo más eficaces posibles», aunque admitió que sus «expectativas son limitadas».
«Todo dependerá de las instrucciones que Lavrov haya recibido», expresó.
«Nuestros intereses son cesar el fuego, liberar nuestros territorios. Y el tercer punto es resolver todas las cuestiones humanitarias», enfatizó.