Bariloche: un joven se quitó la vida luego de que su mejor amiga lo denunciara falsamente por abuso sexual
La amiga, menor de edad, reconoció que hizo la denuncia en “un momento de bronca y enojo”, y le pidió disculpas.
Un joven de 18 años que había sido acusado de abuso sexual por su mejor amiga -quien luego pidió disculpas públicas y reconoció que era mentira- se suicidó hace una semana.
Todo empezó a principios de diciembre, cuando Agustín Muñoz, oriundo de Bariloche, participó de una marcha de mujeres que, bajo la consigna “Nunca más solas, nunca más calladas”, reunió a decenas de jóvenes en el centro cívico para recordar a las mujeres que fallecieron asesinadas y pedir el fin de los abusos.
En esa marcha se leyó una lista de presuntos abusadores. Fue en ese momento fue que su amiga A. lo denunció por abuso sexual, dejándolo en evidencia frente a los presentes y más tarde en una publicación que se viralizó en redes sociales.
“En el medio de esa marcha gritan su nombre y él quedó estupefacto. Lo primero que atinó fue a correr a casa, llegó ese día desesperado y me contó lo que le había pasado”, contó Silvina Castañeda, madre de Agustín, en diálogo con el portal Bariloche 2000.
“Cuando vamos a buscar la publicación ya se había viralizado. Tomé contacto con esta chica y recapacitó. Teníamos un afecto muy grande con ella y pidió disculpas rápidamente para tratar de frenar todo”. En esos mensajes la amiga de su hijo le pedía disculpas y le preguntaba cómo podían arreglarlo. “No quiero más quilombos”, le escribió.
En su redes, Silvina publicó los chats con la joven y las capturas del pedido público de disculpas de A. “Hoy una chica escrachó a mi hijo en Instagram por enojo y ahora no sabe como parar la bola”, escribió. “Jugar con esto es terrible, es una burla hacia todas las victimas de violación, abuso y vejaciones”. Y agregó: “¡Y a vos A. que tanto te cuidamos en casa no entiendo como le pagaste a mi hijo su amistad! Pedir perdón no alcanza”.
“Fue un momento de bronca y enojo”, escribió la joven en su cuenta de Instagram, que ya no está activa, para rectificar su denuncia. “No supe ver el límite de esto”. También pidió disculpas “por difamar” y “por mandármela más de una vez en su casa flasheando confianza”. “De los errores se aprende y me las mandé posta”, concluyó.