Ariel Acuña defendio a la Policia chaqueña luego de saberse el gasto de 700.000 pesos en bizcochos
Luego de tomar estado público dos erogaciones de la Policía del Chaco por la suma total de 685.840 pesos para la compra de bizcochos, el jefe de la fuerza Ariel Acuña explicó en detalle el gasto.
Si bien las compras que realiza el Estado se publican en la página de la Contaduría General de la Provincia, ésta en particular tuvo trascendencia pública, tanto que llegó incluso a medios nacionales.
Se trata de dos erogaciones para la compra de bizcochos, una por 390.000 pesos a cambio de 2.000 kilos de bizcochos (195 pesos el kilo) y otra por 295.840 pesos por 1376 kilos de bizcochos (215 pesos el kilo). Ambas dan un total de 685.840 pesos.
En ese sentido, Ariel Acuña, jefe de la Policía, habló con Diario Chaco y explicó que “Las dos compras que fueron publicadas y sacadas de contexto son reales, existen y se han comprado esos insumos que son bizcochos. ¿Qué es lo que no se aclaró ahí? Que son compras para dos unidades distintas, que son hechas a través de licitaciones y que son compras para el consumo de tres meses”.
Acuña detalló que “la primera compra, que es una compra de alrededor de 390 mil pesos, es destinada al área del Departamento Central de Jefatura de Policía donde no sólo está la oficina del jefe sino también del subjefe y un sinnúmero de direcciones y divisiones, prestan servicio más de 300 empleados policiales sin contar los que a diario concurren a hacer trámites y que a veces tienen que permanecer todo el día allí. A esos empleados es que está destinado esta compra”.
“La otra compra está destinada a lo que es el departamento Logística que está pasando el acceso Norte entre rutas 11 y 16, es un galpón muy grande donde entre otras cosas está el taller de la Policía, la sastrería policial, arsenales. Ahí prestan servicio más de 100 empleados pero también a diario y desde distintos puntos de la provincia bajan vehículos policiales y tienen que permanecer durante todo el día en ese lugar y se los invita a un desayuno o merienda”, agregó.
El jefe de la fuerza expuso también que “hay que aclarar es que la Policía es el único estamento de empleados del Estado que no percibe en sus haberes el ítem que tiene que ver con Refrigerio. O sea, un policía común cuando sale a la calle a prestar servicio quiere tomar agua y tiene que comprar o quiere comer algo y tiene que comprárselo”.
Sobre la compra, afirmó que la cantidad es “para el consumo durante tres meses” y expresó que “se hace una licitación, se saca la cuenta con la cantidad de empleados y la cantidad diaria de consumición, en este caso eran 3.000 kilos aproximadamente. La policía dice que necesita 3.000 kilos, llama a los panaderos oferentes, el que ofrezca el mejor precio y una calidad acorde a lo que se necesita termina ganando la licitación; a ese se le otorga la orden de compra, Hacienda libera el pago a través de Policía, se le efectúa el pago, no retira toda la cantidad, sino que del local de donde venden va retirando la cantidad que necesita en forma diaria”.
“Es lo mismo que cuando alguien compra combustible, aceite o cualquier otro equipamiento. Para nosotros es imposible que compremos uno o dos litros de aceite o 10 litros de combustible por patrullero, sino que compramos grandes cantidades y vamos retirando de acuerdo con la necesidad diaria”, añadió.
Además remarcó que “este expediente se originó en el mes de junio o primeros días de julio. Esto no es como cuando alguien va a la panadería a comprar un kilo de bizcochos, lleva la plata y ya se lo entregan, sino que tiene que hacer ese llamado a licitación y toda la operatoria de compra y pagos termina ocupando más o menos un espacio de tiempo de entre 40 y 60 días; o sea, este expediente se originó más o menos 60 días atrás”.
Es por eso que “si se mira en el sistema es posible que ahora ya esté ingresando una nueva compra porque si yo digo que es para tres meses y se originó hace 60 días, quiere decir que ya estamos en el tercer mes, estamos terminando de consumir lo que se gastó. Entonces se tiene que estar generando la próxima compra para que cuando esto se termine, siga habiendo. Es lo mismo que con el combustible o con cualquier insumo, se tiene que tener previsto que no se termine y que siga la cadena”.
Por último, el funcionario manifestó “son montos que se compran habitualmente”. “Si se toma cualquier cosa sacada de contexto, y sí, todo va a parecer raro. No hay problema con que se publique y que se comente, el tema es que se ajuste a la verdad”, dijo y agregó que “sin dudas” cree que tuvo intencionalidad política.