A través de un comunicado, la Iglesia mostró su preocupación por el aumento de la pobreza y la desigualdad
En Navidad, la Conferencia Episcopal Argentina invitó a “soñar con otro destino para los argentinos”. Preocupación entre las autoridades.
Según el último informe del Observatorio de Deuda Social de la UCA, la pobreza en la Argentina subió cinco puntos, se ubicó en 33,6% el tercer trimestre y afecta a 13,6 millones de personas. El aumento en el índice se explicó por la escalada inflacionaria tras la devaluación del peso y la caída del salario real a lo largo de 2018. En su mensaje de Navidad, la Iglesia pidió “no perder la esperanza” pese al difícil contexto social.
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) emitió un comunicado en el que “invitó a escuchar este llamado de Navidad y a soñar con otro destino para los argentinos”. En este sentido, su presidente, el obispo de San Isidro Oscar Vicente Ojea, pidió “reconstruir todos los vínculos sociales”, especialmente en la Patria, que, señaló, constituye “el desafío para poder transformar la realidad, con vocación de servicio”.
En línea con este reclamo, el cardenal de Buenos Aires, Mario Aurelio Poli, envió un contundente mensaje en el que pidió “no olvidarnos de los pobres y los enfermos que tenemos cerca”. La pobreza en la Argentina alcanza a 13,6 millones de argentinos y en el último año se sumaron a esta línea 2,2 millones de personas.
El 20 de diciembre, Mauricio Macri recibió a los integrantes de la comisión ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA). Tras el encuentro, admitió: “Todavía tenemos meses duros por delante”. Los obispos expusieron su preocupación por el aumento de cifras como la de drogadicción y de desempleo, que llegó al 9% el tercer trimestre del año.
Andrés Stanovnik, arzobispo de Corrientes, afirmó en su homilía ir hacia “los que más sufren”, los que entiende muchas veces la “sociedad desprecia y descarta”. Y agregó: “Mientras haya inequidad se impone la anomia denominada como ‘la ley del más fuerte’ y se pisotea a los débiles”.
Otro de los que manifestaron su preocupación por el incremento de la pobreza fue el monseñor de Santa Fe, Sergio Fenoy. “Como a muchos, esta Navidad nos preocupa que se vea marcada por el aumento de la pobreza, el desaliento, la violencia en la calle y en las familias”. Y remarcó: “La esperanza es uno de los signos más hermosos de la Navidad”.